El gran maestro internacional de ajedrez Nigel Short vivó una curiosa situación: fue el único pasajero en un vuelo comercial que viajaba de Johannesburgo, Sudáfrica, hasta el aeropuerto de Victoria Falls, Zimbabue. Short, que perdió la final del Campeonato del Mundo de ajedrez ante Garry Kasparov en 1993, alucinó cuando supo que era uno de los cuatro únicos pasajeros del Boeing 737 de Air Zimbabwe que cubría el trayecto. Su sopresa fue mayor cuando ninguna de las otras tres personas apareció y viajó sólo, con los 105 asientos del avión para él.
“Fui a hacer el check in y me dijeron que no llegara tarde porque era uno de los únicos cuatro pasajeros del vuelo, así que fui a mi puerta a la hora y no había nadie allí. Me sentí incómodo porque pensaba que me había confundido o había llegado demasiado pronto”, explicó el ajedrecista a today.com . Fue tal su sorpresa que tuvo que consultar “4 o 5 veces” los monitores con la información de las puertas. Finalmente apareció una azafata de la compañía y le indicó que iba a viajar sólo. Obviamente, los miembros de la compañia evitaron las típicas situaciones de ‘última llamada’ o ‘pasajeros con niños pueden embarcar primero’.
Según Short, el personal de la aerolínea fue “muy atento” y completaron la demostración de seguridad. No pidió viajar en primera clase porque había un chico de la tripulación sentado allí, “así que me quede en la clase económica”. Sí que cambió su asiento a uno de ventanilla, fue “atendido por dos chicas” y, como curiosidad, explicó que todos los anuncios iban dirigidos hacia él: “decían cosas como ‘señor Short, estamos empezando el descenso.’” El británico aseguró que “viajo un montón y he estado en unos 100 países. De vez en cuando vas en un avión sin muchos pasajeros, pero hay una diferencia cuando tú eres el único pasajero”.
El motivo por el que el avión viajó pese a tener a un sólo un pasajero
La compañía tuvo que explicar por qué se realizó el vuelo pese a tener a un solo pasajero. El motivo fue que necesitaban el avión en Victoria Falls para operar otros vuelos y algunos clientes que debían coger ese vuelo habían optado por cambiar sus billetes a otros que salían más temprano, según explicó la asistente del CEO de la compañía, Emma Benhura. Tras recoger el único equipaje en la cinta, Short fue a visitar las célebres cataratas Victoria. “Estaban muy bien, pero no puedo imaginar que tendré una experiencia como la del vuelo nunca más”, sentenció. - mundodeportivo.com
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