Un hombre se roció este vIernes con gasolina, y acto seguido se inmoló, frente a una sucursal del banco Piraeus, en la ciudad griega de Tesalónica. Antes de ejecutar su acción, explicó que era un trabajador de una pequeña empresa arruinado al no haber conseguido préstamos de los bancos. El hombre, de 56 años de edad, fue hospitalizado y su vida no corre peligro. AF/NONTAS STILIANIDIS