Había parado para disfrutar de un pequeño descanso, pero su tranquilidad fue interrumpida de repente por el grito de un bañista que se estaba ahogando y pedía auxilio. Es la historia de Kevin Pratt, un ciclista que el pasado fin de semana se convirtió en un héroe después de salvarle la vida a un nadador en las aguas casi congeladas del río Oregon, en EE.UU.
Como se puede ver en las imágenes, el hombre accidentado fue socorrido por el ciclista de inmediato. La intervención fue tan oportuna que si se hubiera producido momentos después, quizás no lo hubiera contado. El nadador fue sacado del agua inconsciente y, como atestiguan las imágenes grabadas por un aficionado, tuvo que ser reanimado por los servicios de emergencia, que le llevaron hasta el hospital cercano. Al final, todo quedó en un susto. AFP