CUANDO UN ELEFANTE QUIERE RASCARSE, SAL CORRIENDO


Dos visitantes del parque Nacional de Pilanesberg, en Sudáfrica, daban una vuelta en su pequeño coche de alquiler cuando se cruzaron con un elefante afectado por una tremenda picazón. Y, claro, la urgencia de rascarse la barriga era tanta que el paquidermo no se lo pensó dos veces y utilizo el Wolkswagen Polo para aliviarse. El animal no iba con malas intenciones pero los turistas se llevaron un susto de muerte, aunque, afortunadamente tras el zarandeo salieron ilesos.

Publicar un comentario

0 Comentarios