Cheryl Semien, una empleada de un restaurante de comida rápida en el estado de Texas (EE.UU.), quedó asombrada cuando una de sus clientas se quitó su abrigo de visón y se lo regaló. La trabajadora simplemente felicitó a la mujer, que aquel día cumplía años.
La generosa mujer, que se negó a revelar su apellido, solo le dijo a los medios locales que se llamaba Nadin y que el valor del sorpresivo regalo ascendía a unos 10.000 dólares, informa el portal 'abc13'. RT.COM
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