Los vecinos de Lorca que paseaban este miércoles por la mañana por la alameda de los Tristes no daban crédito cuando cruzaban un paso de cebra recién pintado en esta calle adyacente a la alameda Cervantes. Y es que solo hacía falta echar un ojo a la señalización para percatarse de que las líneas estaban pintadas en paralelo al sentido de circulación de los peatones.
Para complicar más el asunto, la señalización no se realizó sobre el asfalto, sino sobre adoquines de un material poroso que impidió que los trabajadores puedieran volver a pintar sobre estos. De esta forma, la solución a este contratiempo pasó por levantar los adoquines, darles la vuelta y volver a pintar sobre la otra cara.
El Ayuntamiento de Lorca aseguró que la empresa encargada de estas obras, integradas dentro del plan de regeneración urbana de la alameda Cervantes y sus calles adyacentes, pidió disculpas por este error y aseguró que intentaría enmendar el fallo lo antes posible. Tanto es así que el paso de cebra ya se encuentra arreglado después de que los obreros trabajaran a destajo durante esta mañana y este mediodía para levantar los adoquines y volver a pintarlos.
Los trabajadores arreglaron este miércoles por la mediodía el paso de cebra pintado al revés en una calle de Lorca.
0 Comentarios