Los seres humanos más pequeños también pueden beneficiarse de los avances que el sector de la robótica está experimentando en estos últimos años.
En los primeros meses de vida, los recién llegados a este mundo ya tienen que enfrentarse a algunos problemillas. Uno de los más recurrentes está relacionado con el aire y con el dolor. El niño ingiere aire junto con la leche, y si no expulsa ese aire eructando, su poco maduro sistema digestivo le provocará fuertes dolores en el estómago. Un dolor que se propagará a la cabeza de los progenitores, tanto en forma de dolor físico como emocional; no es fácil soportar los lloros de tu hijo recién nacido.
Para facilitar que ese aire sea expulsado, se sitúa al niño en diversas posiciones, dándole golpecitos en la espalda, esperando que la física cumpla sus reglas y los fluidos se muevan dejando que el aire acabe siendo expulsado por la boca.
Por desgracia, para desespero de los padres, no siempre funciona este sistema “manual”. Por eso nos gusta ver que hay investigadores trabajando en soluciones robóticas que puedan garantizar el éxito de esta operación.
Como podemos ver en el vídeo que han presentado los chicos de “The Useless Duck Company“, el prototipo es prometedor. La estructura ergonómica, diseñada científicamente, coloca al niño en la posición idónea para que los eructos aparezcan con facilidad gracias a los golpecitos que un par de manos abiertas le van propinando con la cadencia y fuerza adecuadas. - nopuedocreer.com
Una explicación más detallada del proyecto:
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