El departamento antidrogas de EE.UU., la DEA, anda buscando un contratista para incinerar marihuana a un ritmo de una tonelada cada dos horas en su sede de Arizona, según un oferta publicada por la división de la DEA en Houston y a la que ha tenido acceso Quartz (si aún no conoces este medio, recuerda estas siglas: QZ).
Una tonelada de marihuana no es asunto baladí: estamos hablando de casi un millón y medio de porros con medio gramo de hierba cada uno. Cada dos horas. La marihuana llegará a Arizona desde doce ciudades de Estados Unidos y forma parte de las 400 toneladas de marihuana ilegal que la DEA incauta anualmente en el país, una cifra que, por cierto, no deja de mermar desde la despenalización de la planta en varios estados.
La marihuana, detalla la oferta de la DEA, llegará a Arizona en forma de “ladrillos fuertemente comprimidos”, con un peso de entre 15 y 25 kilos, incluyendo cartón, papel de aluminio, papel de envolver, cinta americana y envases plásticos.
“La integridad del proceso de destrucción será tal que el material a destruir no podrá ser recuperado una vez realizada la destrucción”, insiste el suspicaz pliego de condiciones de la agencia antidrogas. La ‘maría’ deberá destruirse “hasta el punto de que no queden niveles detectables, medidos según los métodos analíticos estándar, del subproducto tras el proceso de incineración. La DEA inspeccionará el incinerador para asegurarse de que no queden residuos de la droga”.
El contrato también especifica que el personal de la DEA estará siempre presente mirando (y oliendo) el proceso de incineración, que también será vigilado y grabado por un circuito cerrado de cámaras. Los que no podrán asistir (ni oler) al espectáculo serán los curiosos y, para ello, la agencia antidrogas exige levantar una valla suficientemente alta como para impedir la vista por parte de los transéuntes.
El departamento de vigilancia fronteriza de EE.UU. (CPB, Customs and Border Protection) también busca a alguien para quemar sus drogas, en este caso con un menú más variado: marihuana, hachís, cocaína, heroína, metanfetamina, esteroides, opiáceos y khat. En su caso, la empresa contratista deberá incinerar entre 700 7 2.500 kilos cada mes de las citadas sustancias. Como curiosidad, y por si estás interesado en acudir al concurso, la CPB informa que la marihuana se desintegra a 1.500 grados Fahrenheit (815º C), en tanto la heroína y la cocaína lo hacen a 1.800 grados Fahrenheit (988º C).
Noticia original en Quartz. Con información de Insight Crime. - strambotic
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