Hay ‘simpas’ y ‘simpas’. El de la mariscada que intentó la semana pasada un italiano en Formentera tuvo su mérito por la cuantía (420 euros de multa) y la audacia: en un chiringuito en una isla llana y sin posible escapatoria. Un plan sin fisuras.
En el otro extremo, no solo de preparación sino del mundo está el espectacular ‘simpa’ que protagonizaron en 2012 un grupo de amigotes al mejor estilo de peli de acción: cuatro hombres de traje y corbata bebieron varias rondas de copas en el club que corona la Torre Rialto, a 243 metros de altura del suelo de Melbourne. Una vez acabadas las consumiciones se pusieron unos paracaídas que traían escondidos y saltaron al vacío desde el piso 55, a 243 metros del suelo.
La operación simpa del Lui Bar tuvo una ejecución digna de ‘Ocean’s Eleven’. Según el relato del gerente del bar, los cuatro tipos encorbatados entraron en el local con otras tantas mochilas. El local tiene prohibido entrar con equipaje, así que los camareros pidieron que dejaran los bultos en consigna, pero “ellos se negaron, alegando que necesitaban el contenido de las bolsas para una presentación que estaban preparando”, según explicó el estupefacto encargado Shannon Bennet.
La “presentación” consistió en lo siguiente: los cuatro hombres pidieron varias rondas de cócteles Negroni (vermut, Campari y ginebra a partes iguales). La cuenta era absurdamente pequeña, apenas 60 euros insuficientes, desde luego, para justificar semejante despliegue. Una vez consumidas las bebidas, entraron por turnos al baño, se pusieron las mochilas con los paracaídas y se dirigieron a la terraza. “Cerraron la puerta de la terraza para que no pudiéramos detenerles. Lo único que vi fue al último de ellos saltando al vacío”, recuerda Bennet: “Llevaban puestos cascos con cámaras. Eso es lo que había en las maletas”.
Vistas desde el Loui Bar.
Los cuatro tipos aterrizaron suavemente en la calle, donde un coche les esperaba. El dueño del bar intentó atraparles pero los 55 pisos que mediaban entre los osados gorrones y él resultaron insalvables. Previsiblemente, un portavoz de la policía de Melbourne afirmó que “saltar desde el Rialto es un acto altamente estúpido”. Que les quiten lo saltao.
Visto en News.com.au. Con información de Mirror y Strambotic.