Las autoridades de Hanóver, Alemania, han optado por combatir la delincuencia a través de todos los medios posibles y han empezado a invertir en una innovadora red de policías voladores. Se estima que todos los recursos gastados en poner la iniciativa en marcha se compensarán de sobra, ya que el plazo promedio de servicio de los nuevos efectivos aéreos puede llegar a los 118 años.
No se trata ni de últimas tecnologías ni del desarrollo de nuevas capacidades humanas. Hanóver fundó una base de entrenamiento para aves rapaces. Se opina que el futuro más prometedor dentro de las filas de la policía local será el de los buitres, gracias a su olfato y a su vista excelentes.
La iniciativa se debe a una figura muy peculiar: Reiner Herrman, especialista en tecnología criminalística y el experto más conocido en Alemania en la dactiloscopia de los loros. Herrman comenta: "Un colega vio una película sobre los buitres. Ahí se mencionaba su olfato único. Me lo comentó y yo conseguí convencer a los jefes de que merecía la pena intentar emplearlos en nuestro trabajo".
Los policías afirman que los buitres son muy poco caballeros, pero se les perdona todo por su olfato. Sherlock es el primer buitre en el polígono de entrenamiento de Hanóver para aves rapaces. Justifica su nombre: por una parte, tiene un carácter muy difícil, al igual que el famoso detective, pero, por otra parte, tras sólo tres meses de duros entrenamientos ya forma parte del cuerpo policial y supera con creces a los sabuesos: se podría decir que es capaz de encontrar una aguja en un pajar.
El entrenador de Sherlock, German Alonso, comenta que mientras que en el polígono el ave es capaz de encontrar cualquier cosa sin ayuda de nadie, para trabajar en condiciones reales necesita a un compañero. Los buitres no tendrán ni uniforme ni placa: les estorbarían al volar. Sin embargo, sí contarán con algo que más de uno en el cuerpo de policía envidiará: el comedor de la comisaría les preparará un menú especial.
No es el primer caso en el que la policía alemana recluta a unos efectivos bastante insólitos: hace tiempo que emplea a cerdos, cuyo famoso olfato les permite no sólo percibir el olor de una trufa bajo la tierra, sino que también les garantiza éxitos en su carrera policial. Los expertos admiten que los resultados de estos animales en labores de búsqueda, por ejemplo, de drogas son muy alentadores. ACTUALIDAD.RT.COM
No se trata ni de últimas tecnologías ni del desarrollo de nuevas capacidades humanas. Hanóver fundó una base de entrenamiento para aves rapaces. Se opina que el futuro más prometedor dentro de las filas de la policía local será el de los buitres, gracias a su olfato y a su vista excelentes.
La iniciativa se debe a una figura muy peculiar: Reiner Herrman, especialista en tecnología criminalística y el experto más conocido en Alemania en la dactiloscopia de los loros. Herrman comenta: "Un colega vio una película sobre los buitres. Ahí se mencionaba su olfato único. Me lo comentó y yo conseguí convencer a los jefes de que merecía la pena intentar emplearlos en nuestro trabajo".
Los policías afirman que los buitres son muy poco caballeros, pero se les perdona todo por su olfato. Sherlock es el primer buitre en el polígono de entrenamiento de Hanóver para aves rapaces. Justifica su nombre: por una parte, tiene un carácter muy difícil, al igual que el famoso detective, pero, por otra parte, tras sólo tres meses de duros entrenamientos ya forma parte del cuerpo policial y supera con creces a los sabuesos: se podría decir que es capaz de encontrar una aguja en un pajar.
El entrenador de Sherlock, German Alonso, comenta que mientras que en el polígono el ave es capaz de encontrar cualquier cosa sin ayuda de nadie, para trabajar en condiciones reales necesita a un compañero. Los buitres no tendrán ni uniforme ni placa: les estorbarían al volar. Sin embargo, sí contarán con algo que más de uno en el cuerpo de policía envidiará: el comedor de la comisaría les preparará un menú especial.
No es el primer caso en el que la policía alemana recluta a unos efectivos bastante insólitos: hace tiempo que emplea a cerdos, cuyo famoso olfato les permite no sólo percibir el olor de una trufa bajo la tierra, sino que también les garantiza éxitos en su carrera policial. Los expertos admiten que los resultados de estos animales en labores de búsqueda, por ejemplo, de drogas son muy alentadores. ACTUALIDAD.RT.COM
0 Comentarios