. . . . le llamen para verificar si está muerto
Un británico de 72 años ha sido enterrado junto a su móvil en cumplimiento de su último y curioso deseo. El hombre, que murió en un incendio, quería que sus amigos lo llamaran una vez que estuviera dentro del féretro para verificar que realmente estaba muerto.
George Ball dejó dicho antes de morir que su servicio fúnebre sólo podría celebrarse si no respondía a la llamada, ya que sólo así se demostraría que no estaba gastando una broma a sus amigos
Según informa el diario The Daily Telegraph, cientos de personas asistieron al funeral del hombre, soldador de profesión, en la localidad inglesa de Bradwell, condado de Staffordshire. Helen Kara, que dirigió la ceremonia, que tuvo carácter humanista y no religioso, explicó a los congregados que uno de los amigos del difunto le había preguntado una vez qué debían hacer con él cuando muriera. Al que George respondió: "Puede poner mi teléfono móvil en el féretro y llamar a este número y entonces yo me levantaré y diré" hola "y todo habrá sido una broma".
Un miembro de la congregación llamó al número del difunto, que sonó en el féretro, pero sin obtener respuesta, por lo que se decidió continuar con la ceremonia. EPF
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