Un año y un día después de haber zarpado para dar la vuelta al mundo en solitario, la adolescente holandesa Laura Dekker culminará este sábado su travesía de 27.000 millas marinas.
La joven ha tenido que lidiar con semanas de soledad, tormentas oceánicas y el temor de toparse con piratas mientras navegaba en un yate de 11 metros llamado Guppy, y todo esto sin dejar de lado sus labores escolares.
Con apenas 16 años y cuatro meses, la intrépida holandesa batió el récord no oficial que ostentaba la australiana Jessica Watson, que estaba a pocos días de cumplir 17 años cuando completó un viaje similar en 2010. A pesar de haber logrado esta gran hazaña, Laura no será parte del libro de los Récord Guinness debido a que, después de la controversia desatada por la joven al anunciar que quería romper el récord a bordo de un pequeño bote cuando tenía tan solo 13 años, la organización decidió eliminar de sus libros la categoría de 'marinero más joven'.
Dekker huyó de su país en 2010 cuando las autoridades de protección de la infancia holandesas pusieron una denuncia para tratar de impedir el viaje. Más tarde ganó una batalla en los tribunales que duró 10 meses, prometiendo a los jueces que compraría un barco más grande con equipo de navegación avanzado y tomaría cursos en primeros auxilios. Además, se comprometió a matricularse en una escuela por correspondencia.
Sus abuelos, sus padres y su hermana Kim están a la espera de su llegada a la isla holandesa de San Martin, ubicada en el Caribe, sitio de donde partió en enero pasado, completando así el tramo desde su último puerto de escala en Sudáfrica de donde zarpó en noviembre. solozeilster.hyves.nl/rt.com
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