A estas alturas un casco de realidad aumentada no es nada sorprendente, pero el Skully P1 de Skully Helmets es muy completo. De hecho, es tan completo que estoy seguro de que más de uno se lo comprará sin tener siquiera una bicicleta. Mi pierna izquierda a que se convierte en el más feroz competidor de las Google Glasses. Aparte de las características usuales de la realidad aumentada (clima, horario, llamadas, control por voz, gps, etc) el Skully P1 posee algo que lo diferencia de sus predecesores: una cámara que hace las veces de retrovisor con un rango de 180 grados, lo que en teoría haría desaparecer todo punto ciego. Eso si no llevamos a nadie montado detrás, claro. En ese caso, bueno, siempre se puede sacar una instantánea del tipo intentando encenderse un cigarrillo a 140 km/h o hacer un zoom al escote. Ya sabéis, los usos habituales de toda cámara. Visto en Wired-nopuedocreer.com