Nootropic Design quiere añadir otra decisión a nuestras vidas, como si elegir entre Enrique Iglesias y Pearl Jam no fuera suficiente. La cuestión es simple: cuando el reloj despertador Defusable dé la alarma, tendremos diez segundos para cortar uno de los cuatro cables; si acertamos la alarma dejará de sonar y no ocurrirá nada más. Pero si fallamos, la dinamita explotará y repartirá nuestros restos por el dormitorio en medio de una deflagración de tintes colosales. Aquí tenéis un video para demostrar lo que digo:
Lo bueno del despertador es que el cable correcto cambia con cada nueva alarma, así que si la primera explosión sólo te cercenó la pierna y provocó algún daño cerebral, puedes estar tranquilo: cada despertar es una nueva posibilidad de morir.

Eso sí, cada noche se deben colocar cables nuevos. Puede sonar algo tedioso, pero ese momento de planificación de la propia muerte se puede usar para pensar una última frase épica que nos haga pasar a la historia. “Nunca toméis analgésicos en ayunas”, por ejemplo. Esta maravilla no está todavía a la venta, pero los interesados pueden dejar su mail en la página de Nootropic para recibir información. NOPUEDOCREER.COM