Un joven neozelandés, de 20 años de edad, fue operado con éxito después de que un cuchillo de 8 centímetros penetrara en su cabeza, dejando fuera solo el astil.
Según la Policía local, el hombre, habitante de la ciudad de Christchurch, sufrió la herida durante una fiesta en su apartamento cuando intervino para impedir la pelea entre dos invitados. Los agentes reportan que el joven estaba consciente cuando acudieron al lugar del incidente, lo que les sorprendió mucho teniendo en cuenta que por encima de su ojo izquierdo se veía el astil amarillo y menos de un centímetro de la hoja del cuchillo, mientras que el resto del arma estaba dentro del cráneo.
El cirujano Leslie Snape, que operó al joven, cuenta que su equipo sufrió un verdadero 'shock' cuando vio cómo era la herida. "Al recibir la llamada, estábamos esperando un pequeño cuchillo y unos tres centímetros hendidos en su cabeza, pero no una hoja de ocho centímetros hundida casi por completo en el cráneo", explica el médico. Según Snape, se trató de un milagro: dos milímetros más y el hombre se hubiera quedado sin su ojo izquierdo, dos centímetros más y se hubiera dañado el celebro. La radiografía de la herida ha recorrido todos los medios de comunicación neozelandeses. - RT
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