Las máquinas expendedoras especializadas en la venta de vino hacen furor en los supermercados de Estados Unidos. En la ciudad de Harrisburg, en el Estado de Pensilvania, se ha introducido por primera vez vino en máquinas expendedoras como ensayo en los supermercados.
Las máquinas ofrecen a sus clientes desde malbecs argentinos hasta merlots californianos. Los consumidores pueden escoger su próxima botella de un catálogo con 53 cepas distintas.
Las estrictas leyes de licencias en Pensilvania sólo permiten a los individuos comprar vinos y licores para el consumo doméstico en las tiendas de propiedad estatal. Para poder sacar las bebidas de las máquinas, el usuario debe pasar su licencia de conducir por una ranura, mirar a la cámara de TV y soplar en el detector de alcohol. Todo esto, según los inventores del aparato, debe prevenir la venta de alcohol a los adolescentes.
Los clientes de un supermercado a las afueras de Harrisburg se mostraron entusiasmados con la idea de tener esta opción de forma permanente. Y ahora hay muchas personas dispuestas a comprar vino usando estas máquinas. En otro supermercado de esta ciudad pensilvana la máquina expendedora de alcohol fue bienvenida y los consumidores aprovecharon para hacer preguntas y revisar los folletos con las descripciones de los vinos.
"Esto es simplemente comprar de forma conveniente de una sola vez. Sería muy bueno tener todo en el mismo lugar", dijo Darby Golec, habitante de ese barrio de Harrisburg, de 28 años. Si las máquinas continúan con el éxito que han cosechado por el momento en los dos supermercados, según el Consejo de Control del Licor, colocarán estos aparatos de alta tecnología en otros 100 más. ACTUALIDAD.RT.COM
Las máquinas ofrecen a sus clientes desde malbecs argentinos hasta merlots californianos. Los consumidores pueden escoger su próxima botella de un catálogo con 53 cepas distintas.
Las estrictas leyes de licencias en Pensilvania sólo permiten a los individuos comprar vinos y licores para el consumo doméstico en las tiendas de propiedad estatal. Para poder sacar las bebidas de las máquinas, el usuario debe pasar su licencia de conducir por una ranura, mirar a la cámara de TV y soplar en el detector de alcohol. Todo esto, según los inventores del aparato, debe prevenir la venta de alcohol a los adolescentes.
Los clientes de un supermercado a las afueras de Harrisburg se mostraron entusiasmados con la idea de tener esta opción de forma permanente. Y ahora hay muchas personas dispuestas a comprar vino usando estas máquinas. En otro supermercado de esta ciudad pensilvana la máquina expendedora de alcohol fue bienvenida y los consumidores aprovecharon para hacer preguntas y revisar los folletos con las descripciones de los vinos.
"Esto es simplemente comprar de forma conveniente de una sola vez. Sería muy bueno tener todo en el mismo lugar", dijo Darby Golec, habitante de ese barrio de Harrisburg, de 28 años. Si las máquinas continúan con el éxito que han cosechado por el momento en los dos supermercados, según el Consejo de Control del Licor, colocarán estos aparatos de alta tecnología en otros 100 más. ACTUALIDAD.RT.COM
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